El primer año de aplicación en España del pago verde puede considerarse satisfactorio en términos medioambientales y de aumento de la biodiversidad, según el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA). Así lo ha resaltado el FEGA en su informe sobre el primer año de aplicación del pago para prácticas beneficiosas para el clima y el medio ambiente, el denominado "greening" o pago verde. Se observa un efecto positivo en la diversificación de cultivos y, por tanto, en términos de un aumento de la biodiversidad, y de la calidad del suelo, ya que un buen número de explotaciones, aunque mantienen la misma superficie, han aumentado el número de cultivos en 2015 en relación con 2014. Si bien no se ha producido un incremento relevante de las superficies de los grandes cultivos (cereales y oleaginosas), existe un aumento de la superficie cultivada de determinadas proteaginosas y leguminosas (habas, veza, esparceta, titarros), así como de las tierras dedicadas al barbecho
En concreto, se solicitó ayuda asociada a los cultivos proteicos para 202.499 hectáreas de proteaginosas, 381.715 hectáreas de leguminosas y 790.530 de oleaginosas.
En lo que se refiere a los cultivos fijadores de nitrógeno, un total de 711.241 hectáreas se han utilizado para el cómputo de superficies de interés ecológico (SIE) en 2015.
Esto ha supuesto un "beneficio medioambiental relevante, desde un punto de vista de la biodiversidad y de la reducción del uso de determinados medios de producción", dadas las características agronómicas de estos cultivos.
La normativa nacional ha establecido además requisitos específicos en materia de mantenimiento del cultivo, como mínimo, hasta un determinado estado fenológico, dependiendo del tipo de cultivo y de su aprovechamiento.
También se exige que al año siguiente, por medio de la rotación, otros cultivos que no tienen la capacidad de fijar nitrógeno, puedan beneficiarse de las ventajas que aportan al suelo las leguminosas.
Por otra parte, se contabilizan como SIE un total de 975.494 hectáreas de barbecho sin producción, cuyas implicaciones medioambientales son, asimismo, en materia de biodiversidad importantes, ha detallado el FEGA.
No se está produciendo una reducción de la superficie de pastos permanentes
Además, han sido designadas en España 2.053.279 hectáreas de pastos medioambientalmente sensibles ubicadas en zona Natura 2000 y se han computado 4.702.592 hectáreas de pastos permanentes de productores obligados al "greening", a efectos del cálculo del ratio anual exigido por la reglamentación comunitaria.
Dicho cálculo ha permitido constatar que no se está produciendo una reducción de la superficie de pastos permanentes -importantes desde el punto de vista de la captura de carbono- declarada en España.
El FEGA ha recordado que el pago verde tiene carácter anual y se concede por cada hectárea admisible vinculada a un derecho de pago básico a los agricultores que diversifican cultivos, mantienen los pastos permanentes existentes y cuentan con SIE en sus explotaciones.
Los productores que se dedican a la agricultura ecológica, los acogidos al régimen de pequeños agricultores que cobren menos de 1.250 euros de pagos directos y los que disponen de viñedo, olivar, cítricos, frutales y, en general, cultivos que permanecen en el terreno durante 5 o más años y que no entran en la rotación de cultivos de la explotación tienen derecho "ipso facto" a este pago.
El límite presupuestario para este pago en su primer año de aplicación es de cerca de 1.453 millones de euros.
Fuente: agroinformacion.com