La prueba se desarrolló con un tiempo formidable y con más de 50 participantes llegados desde diversos puntos del país, todo dentro de un espíritu competitivo, pero donde también reinó la cordialidad y deportividad entre todos los participantes, realizándose pruebas de paloma lanzada y de liebre salvaje.
Aunque la densidad de liebres no fue la de otras ediciones, todos los cetreros pudieron poner a prueba a sus compañeros alados con las difíciles liebres villarteras, que corrían “como demonios” y ponían en difícil situación a los Azores, Harris y hasta alguna Águila Real, que vino a probar fortuna, procedente de la ciudad de Talavera de la Reina.
Como en el espíritu de la competición cetrera, lo importante no es la captura, y como la cetrería está considerada con una práctica de caza selectiva, donde se enfrentan dos animales y donde el ser humano, tiene poca intervención, las capturas suelen ser mínimas, y en el campeonato solo se consiguieron tres capturas, pero el resultado final es que todo el mundo desea volver el próximo año para seguir probando suerte.
Tras las diferentes sueltas, la clasificación quedó de la siguiente forma: 1º Víctor Manuel Moreno, de Alarcón (Alicante); el segundo lugar fue para Antonio Martínez Carrero, de Madrid y el tercer lugar para Ángel Muñoz Sobrino, de Córdoba.
Fuente: eldiadigital.es