En este sentido, atendiendo a la situación concreta en la localidad, García Muñoz reseñaba «un descenso en el número de empresas en situación precaria y con expectativas de despidos», a la vez que se observa «un aumento de empresas pendientes del momento de empezar a contratar trabajadores, de nuevas empresas y autónomos». Con estos datos encima de la mesa, García Muñoz considera que «a medio plazo deberíamos poder empezar a ver la luz».
A pesar de todo, el directivo de AEDA considera que «aún queda trabajo por hacer». Es necesario «reducir el número de contratos y no aumentar la presión fiscal sobre la pequeña y mediana empresa», en referencia a los cambios en las bases de cotización que contempla el Real Decreto-ley 16/2013 de 20 de diciembre. Según la opinión de García Muñoz, «no es el momento más adecuado para tomar estas medidas» ya que «podrían romper la tendencia positiva actual», señalando, como ejemplo, el «resultado contraproducente de la última subida del IVA». A su juicio, esta medida «ha disminuido el consumo y aumentado la economía sumergida».
POLÍTICA SOLIDARIA. El problema del incremento del IVA tiene solución, según el directivo, solución que pasa por trabajar en pos del objetivo de una «cultura fiscal más solidaria tanto en la empresa como en el hogar» lo que conduciría «a una disminución de las cargas fiscales sobre la población».
Por otro lado, considera «escaso» el apoyo de la banca a los empresarios. García Muñoz ve en el acceso al crédito uno de los principales problemas. «Llega muy poco y dependiendo directamente de avales, sin tener en cuenta los estudios de viabilidad que se presenten». Por el contrario, «se cobran cada vez más intereses y comisiones por las transacciones», concluía.
Fuente: www.latribunadeciudadreal.es