Bajo un cielo encapotado gris oscuro, una traca de fuegos artificiales anunció el inicio del camino por parte de la patrona, a la que acompañaron hasta las puertas de la localidad el párroco local, Ángel Almansa; el hermano mayor de la Virgen, Cristóbal Jiménez; y el alcalde, Pedro Ángel Jiménez, que además se unió al acompañamiento, que superadas las 9.00 horas, emprendía los aproximadamente doce kilómetros que separan la localidad de la ermita. Portada por diez vecinos devotos, la imagen llegaba, poco después de las 11.00 h., al entorno del Castillo de Peñarroya para hacer una primera parada en el humilladero, y a las 11.30 horas entraba definitivamente en su ermita, bajo una lluvia de vivas a la virgen, a su hijo y al “chatillo”. Allí permanecerá hasta hoy, en el que el pueblo de La Solana, de la que también es patrona, la lleve a su localidad donde estará hasta el lunes siguiente a San Antón, en el mes de enero, que volverá de nuevo a su ermita.
Las rachas de viento y las continuas amenazas de lluvia no consiguieron mermar las ganas de los pueblos de Argamasilla y La Solana de celebrar la romería en honor a su patrona, congregándose miles de personas en el Castillo de Peñarroya.
Fuente: Lanza digital